Reconocemos que vivimos en un mundo cambiante, lleno de retos y en donde es posible crear oportunidades para todos si se utilizan las tecnologías con sentido humano. Las universidades debemos avanzar en una cultura de innovación, y es por eso que se requiere que estudiantes y profesores no sólo conozcan cómo manipular las tecnologías, sino también desarrollen la capacidad para analizar otros posibles usos, crear modelos de implementación, evaluar sus resultados y buscar la mejora continua.